**Title: Jason fue disparado por Pascal – Britt se vio obligada a confesar 2 impactantes verdades a Jason**

En un giro devastador de los acontecimientos en *General Hospital*, Jason Morgan ha sido gravemente herido tras un ataque traicionero de Pascal, el conserje que ha estado manipulando los hilos en el resort Five Poppies. La atmósfera de tranquilidad se ha convertido en un campo de batalla, y la vida de Jason pende de un hilo mientras Britt Westburn, atrapada en un juego mortal, se ve forzada a revelar secretos que podrían cambiarlo todo.

La llegada inesperada de Jason, bajo el alias John Moore, ha encendido las alarmas de Pascal, quien ha estado monitoreando a Britt. La tensión se intensifica cuando Jason y Britt se reencuentran emocionalmente, despertando en ella una chispa de esperanza que amenaza con desmoronar los planes de Pascal. Sin embargo, la situación se tornó crítica cuando Pascal, sintiendo que su misión estaba en peligro, tomó la decisión fatídica de disparar.

El eco del disparo resonó en el resort mientras Jason caía, la sangre manando de su pecho. En un momento desgarrador, Britt, en un intento desesperado por salvarlo, confiesa que está embarazada de él, un secreto que había mantenido oculto en medio de su cautiverio. La revelación transforma la lucha de Jason por sobrevivir en una carrera contra el tiempo, no solo por su vida, sino por la de su hijo no nacido.

Mientras el caos se desata y la seguridad del resort se acerca, Britt se enfrenta a una decisión imposible: buscar ayuda médica para Jason, arriesgando su captura, o intentar escapar utilizando sus conocimientos del resort. La presión aumenta y cada segundo cuenta. La vida de Jason y el futuro de su familia están en juego, y la amenaza de Pascal se cierne sobre ellos.

¿Logrará Britt salvar a Jason y proteger su futuro juntos, o se verán atrapados en una red de traiciones y peligros? La respuesta a esta angustiante pregunta definirá no solo el destino de Jason y Britt, sino también el equilibrio de poder en Port Charles. ¡La tensión nunca ha sido tan palpable!