Fabiola Martínez ha estallado en una acalorada defensa de su hijo Kike durante una reciente entrevista, desatando una tormenta mediática. En un cruce de palabras con la periodista Sonsoles Ónega, Fabiola expresó su indignación ante las críticas sobre la visibilidad de su hijo, quien tiene discapacidad. “La naturalidad de mostrar a Kike es un orgullo, no un estigma”, afirmó, subrayando la importancia de dar voz y oportunidades a las personas con discapacidad.
La conversación se tornó intensa cuando Fabiola defendió la decisión de utilizar la imagen de Kike en portadas de revistas, resaltando que la visibilidad es esencial para romper barreras. “Si alguien se molesta, que mire para otro lado”, sentenció, enfatizando que la familia no se avergüenza de su hijo. La presidenta de la Fundación Kike Osborne no solo habló de su papel como madre, sino también de su compromiso con la causa, revelando que han ayudado a más de 30,000 familias en toda España en los últimos 15 años.
La situación se agrava con la incertidumbre sobre el futuro de Kike, quien está a punto de cumplir 18 años y enfrenta la transición fuera de la educación especial. Fabiola criticó la reciente decisión del gobierno de separar colegios de educación especial de los regulares, advirtiendo sobre las consecuencias devastadoras que esto podría tener para muchos niños. “No todos son iguales, y es un error cerrar colegios que ofrecen oportunidades”, argumentó.
Mientras la tensión aumenta, Fabiola también reveló que está trabajando en un libro que aborda temas personales complejos, incluyendo su propia historia de superación. “He sanado muchas cosas”, dijo, dejando claro que su lucha va más allá de la discapacidad de su hijo y aboga por una sociedad más inclusiva. Este enfrentamiento no solo resalta la lucha de una madre, sino que también pone de relieve la necesidad urgente de visibilidad y comprensión hacia las personas con discapacidad.