¡Urgente! La designación de Robert Preb como el nuevo Papa León XIV ha desatado una ola de reacciones, y ninguna es más impactante que la del expresidente Donald Trump. En un giro inesperado, el nuevo pontífice, nacido en Estados Unidos pero con profundas raíces peruanas, ha capturado la atención global, y Trump no se ha hecho esperar. A través de su red social Truth, el exmandatario expresó su orgullo por este hito histórico, destacando que es un “gran honor” para el país tener a un papa estadounidense.
“¡Qué emoción! Espero con ansias conocer al Papa León XIV, será un momento muy significativo”, escribió Trump, reflejando el fervor que su designación ha generado en la nación. Sin embargo, detrás de esta celebración se ocultan tensiones. El nuevo Papa León XIV ha sido crítico de las políticas migratorias de Trump, algo que ha sido evidente en sus publicaciones anteriores en la plataforma X (anteriormente Twitter). En estas, ha cuestionado la postura del expresidente en reuniones sobre deportaciones y ha desafiado la retórica de algunos líderes republicanos.
La llegada de León XIV promete ser un punto de inflexión en la relación entre la Iglesia Católica y la política estadounidense. La comunidad católica y los seguidores de Trump están divididos; mientras algunos celebran la elección de un papa de su nacionalidad, otros temen que sus visiones sobre la migración y la inclusión choquen con el legado de Trump.
Con la tensión en aumento y los ojos del mundo puestos en el nuevo papa, el futuro de esta relación es incierto. La figura de León XIV no solo representa un cambio en el liderazgo espiritual, sino también un desafío directo a las políticas y posturas que han definido la administración de Trump. Este desarrollo podría reconfigurar la narrativa política en Estados Unidos y más allá. ¡Estén atentos para más actualizaciones!