**Título: La sombra del escándalo: ¿Es Iliana Calabró cómplice o víctima de su exmarido?**
El escándalo judicial que rodea a Fabián Rossi, exmarido de Iliana Calabró, ha encendido una tormenta de especulaciones sobre la actriz, quien ha vivido una vida de lujos y comodidades. Con la inminente condena de Rossi por lavado de dinero proveniente de la famosa “Rosadita”, las redes sociales no han tardado en cuestionar la supuesta ignorancia de Iliana sobre los oscuros negocios de su ex. ¿Realmente no sabía nada o simplemente eligió mirar hacia otro lado?
Mientras la Corte Suprema de Justicia de Argentina cierra las puertas a Rossi, condenándolo a cuatro años y medio de prisión, la figura de Iliana se ve atrapada en un torbellino de críticas. Durante años, la actriz disfrutó de un estilo de vida que muchos consideran incompatible con la inocencia que ella sostiene. Viajes, joyas y autos de lujo son solo la punta del iceberg de una existencia que ahora se cuestiona con fervor.
Aunque Iliana ha defendido su posición, afirmando que siempre ha sido ajena a los negocios de Rossi, la opinión pública ha cambiado radicalmente. Las voces en redes sociales exigen transparencia y responsabilidad, cuestionando si es posible que alguien no se dé cuenta del origen de su fortuna. “¿No le llamó la atención el nivel de vida que llevaban?”, se preguntan muchos, mientras la presión sobre ella crece.
Es crucial destacar que, hasta el momento, Iliana no está imputada en ninguna causa y su nombre no aparece en los registros judiciales relacionados con el caso. Sin embargo, la percepción social juega un papel fundamental y, aunque legalmente esté limpia, mediáticamente se encuentra en el ojo del huracán. La historia de Iliana Calabró se convierte así en un reflejo de un patrón más amplio: las esposas de los poderosos que, al estallar el escándalo, claman inocencia.
La pregunta persiste: ¿es Iliana una víctima colateral de un escándalo que nunca vio venir, o es parte de una narrativa que aún tiene capítulos ocultos? La sociedad exige respuestas y el debate está abierto.