El mundo del espectáculo está de luto tras la trágica pérdida de algunas de sus vedettes más icónicas. Entre las noticias más impactantes, Gina Montes, famosa por su participación en “La carabina de Ambrosio”, falleció el 27 de enero de 2024, a los 80 años, en Nueva York, tras una batalla secreta contra el cáncer. Su hija, Judi, mantuvo en privado la noticia, revelando el profundo dolor que dejó su partida. Montes, que se alejó del escenario para vivir una vida alejada del espectáculo, será recordada por su inigualable talento y glamour.
Rosy Mendoza, otra emblemática vedette, falleció el 29 de diciembre de 2023, a los 80 años, tras sufrir complicaciones de salud que la llevaron a cuidados paliativos. Conocida por su trayectoria en cabarets y su icónica figura en el cine de ficheras, Mendoza había enfrentado graves problemas de salud en los últimos años.
La tristeza no termina ahí. Telma Ticu, reconocida vedette argentina, falleció el 15 de enero de 2019, después de complicaciones de una cirugía por un tumor cerebral. Su legado sigue vivo en el corazón de aquellos que disfrutaron de su arte.
En un giro trágico, Eva Norvind, madre de la actriz Nailea Norvind, perdió la vida el 14 de mayo de 2006, arrastrada por una ola en Oaxaca. Su historia es un recordatorio de los peligros a los que se enfrentan incluso las más brillantes estrellas.
La lista continúa con otras figuras como Lupe Vélez, quien dejó este mundo en 1944 a los 36 años, y Meche Barba, fallecida en 2000. Cada una de estas mujeres dejó una huella imborrable en la industria, pero sus muertes nos recuerdan la fragilidad de la vida y la inevitable tristeza que acompaña a la fama.
El espectáculo nunca será el mismo sin ellas. La comunidad artística llora la pérdida de estas talentosas mujeres que, con su luz, transformaron el escenario y capturaron el corazón del público.