¡URGENTE! Las autoridades de Nebraska han denunciado una serie de redadas masivas de ICE que han dejado a la comunidad inmigrante en estado de shock. El alcalde de Omaha, J. Juén, expresó su profunda preocupación por las familias afectadas, destacando la labor de organizaciones que han activado equipos de respuesta rápida para brindar asistencia legal y apoyo humanitario.
Las redadas, que comenzaron ayer, han impactado a cientos de familias, generando un clima de miedo y ansiedad en la comunidad. Según el alcalde, se estima que al menos 80 personas han desaparecido, dejando a sus seres queridos en la incertidumbre. “No sabemos a dónde se fueron ni qué les depara el futuro”, afirmó Juén, quien instó a los residentes a unirse y apoyarse mutuamente en estos momentos difíciles.
La policía de Omaha, que tuvo un papel secundario en las redadas, aseguró que su intervención se limitó al control de tráfico, sin involucrarse en las detenciones. A pesar de esto, la tensión ha crecido, y se han llevado a cabo protestas pacíficas en respuesta a la situación. El jefe de policía enfatizó la importancia de garantizar un ambiente seguro para los manifestantes, instando a la comunidad a actuar de manera pacífica.
Las organizaciones locales, junto con los consulados de México, Guatemala y El Salvador, están trabajando incansablemente para ofrecer recursos y asistencia a los afectados. Se han habilitado líneas de ayuda y centros de información para proporcionar apoyo legal y emocional.
La comunidad de Omaha, que históricamente ha sido un refugio para inmigrantes, se enfrenta a un desafío sin precedentes. Las redadas de ICE han desatado un torrente de preguntas sin respuesta y un llamado urgente a la acción. “Debemos trabajar por la paz en lugar del conflicto”, concluyó el alcalde, mientras la comunidad busca recuperar la tranquilidad perdida.