**Sánchez intenta desviar la atención del escándalo de corrupción con un ataque a la OTAN**

En medio de un creciente escándalo de corrupción que sacude al PSOE, Pedro Sánchez ha decidido convertirse en el adalid del progresismo, enviando una carta a la OTAN en la que se niega a cumplir con el objetivo del 5% del PIB en gasto militar. Esta maniobra parece más un intento desesperado de desviar la atención de las acusaciones que pesan sobre su gobierno que un verdadero compromiso con la defensa nacional.

La situación es crítica: el escándalo involucra a altos funcionarios del PSOE y se centra en la trama de corrupción en Navarra, donde se han revelado conexiones directas entre adjudicaciones de obras públicas y miembros del partido. La reciente confirmación de que un USB, que contenía conversaciones comprometedores con Sánchez, fue tratado de sacar durante un registro policial, añade más leña al fuego. El exministro Ábalos ha insinuado su disposición a colaborar con la fiscalía, lo que podría complicar aún más la situación del presidente.

Mientras el mundo observa con preocupación el conflicto en Oriente Medio, Sánchez elige centrar su atención en un tema que podría fortalecer su posición política, aunque a costa de enemistar a sus aliados internacionales, incluido Donald Trump. En un momento en que la izquierda se tambalea ante las acusaciones de corrupción, el presidente busca recuperar la confianza de sus socios parlamentarios, pero sus acciones podrían resultar contraproducentes.

La presidenta de Navarra, María Chivite, se niega a dimitir a pesar de la presión, defendiendo la honorabilidad del PSOE mientras la corrupción se cierne sobre su administración. Este panorama sombrío señala que la crisis del PSOE podría extenderse a sus aliados, con tres partidos considerando abandonar el grupo mixto en el Congreso.

La situación es volátil y se intensifica cada día. La pregunta que todos se hacen es: ¿podrá Sánchez sobrevivir a esta tormenta política, o su intento de desviar el foco solo acelerará su caída? La respuesta podría estar más cerca de lo que imaginamos.