¡Última hora! Se revela la impactante lista de los 10 países más blancos del mundo, un dato que despierta controversia y debate sobre la diversidad étnica en el planeta. Según un análisis reciente, estos países presentan una abrumadora mayoría de población blanca, lo que genera interrogantes sobre la multiculturalidad y la integración en estas naciones.
Encabezando la lista, Bielorrusia se destaca con un asombroso 98% de población blanca, un fenómeno atribuido a su política de hermetismo. Le sigue Ucrania, que, tras años de conflicto, mantiene un 96% de su población caucásica, una cifra que ha disminuido drásticamente debido a la guerra. Serbia y Lituania también figuran en la lista, con un 95.8% y un 95.7% respectivamente, reflejando una homogeneidad étnica notable.
Croacia y Albania no se quedan atrás, con un 93% y un 94% de eurodescendientes, mientras que Moldavia y Eslovaquia presentan cifras similares, con un 94.8% y un 95% respectivamente. La situación en Letonia es igualmente impactante, donde el 95.5% de la población es de origen europeo del Este.
Este fenómeno no solo plantea cuestiones sobre la diversidad cultural, sino que también invita a la reflexión sobre las políticas migratorias y la inclusión en estos países. La falta de multiculturalidad puede tener repercusiones significativas en la cohesión social y el desarrollo económico.
A medida que el mundo se vuelve cada vez más interconectado, estos datos nos obligan a cuestionar el futuro de la diversidad en estas naciones. La conversación sobre la identidad y la integración nunca ha sido tan urgente. ¿Qué significa esto para el futuro de la humanidad en un mundo globalizado? La respuesta podría cambiar el rumbo de muchas sociedades.