¡ESCÁNDALO EN EL CONGRESO! Pedro Sánchez ha cruzado una línea inaceptable al insultar a la princesa heredera, Leonor, en presencia del rey Felipe VI. En un acto que ha dejado a todos boquiabiertos, el presidente del Gobierno se atrevió a ofrecer su lealtad a la joven princesa mientras su administración se encuentra en el ojo del huracán por sus decisiones controvertidas, incluyendo indultos y amnistías a separatistas.
El momento se tornó especialmente tenso cuando Sánchez, en un discurso que debería haber sido solemne, utilizó la ocasión para recordar la promesa de la Constitución española, mientras que a tan solo días de distancia se reunía con figuras como Carles Puigdemont, a quien se refirió como “president”. Esta acción ha desatado una ola de indignación en la oposición, que no ha dudado en calificarlo de “vergonzoso” y “sinvergüenza”.
Cuca Gamarra, portavoz del Partido Popular, no se contuvo al criticar la falta de respeto hacia la Corona y el pueblo español, afirmando que Sánchez actúa como si él fuera la ley misma, sin consecuencias por sus actos. La indignación también fue palpable en Vox, donde Santiago Abascal denunció que el Gobierno está dispuesto a pisotear la Constitución justo cuando la princesa jura defenderla.
La situación ha escalado a un punto crítico, con llamados a movilizaciones masivas en defensa de la unidad de España y la Constitución. La próxima manifestación en Cibeles promete ser un hito en la respuesta ciudadana ante lo que muchos consideran un ataque directo a las instituciones democráticas. La tensión política está en su punto más alto y la pregunta que todos se hacen es: ¿qué pasará ahora con la estabilidad del Gobierno de Sánchez? La respuesta podría cambiar el rumbo de la política española.