**Título: Jorge Rial en el ojo de la tormenta: ¿Incitación o libertad de expresión?**
En una explosiva transmisión en vivo, Jorge Rial, el reconocido periodista y figura del Partido Peronista, desató una ola de controversia al instar a la población a levantarse contra la policía, a quienes calificó de “malos” y desinteresados en la protección del pueblo. Las palabras de Rial, pronunciadas con evidente rabia, provocaron un silencio incómodo en el estudio y una rápida reacción en redes sociales, donde su llamado a la sublevación se convirtió en tendencia.
La polémica estalló cuando su compañero de programa, Alejandro Fantino, intervino de inmediato, defendiendo a las fuerzas del orden: “La policía es la que nos cuida de la delincuencia. No podemos pedir que se subleven contra quienes nos protegen.” Su respuesta fue aclamada por muchos como un acto de responsabilidad en medio de la tormenta verbal desatada por Rial.
Las redes sociales ardieron con comentarios que oscilaban entre la defensa de Rial como un provocador necesario y la condena a su irresponsabilidad. “Hablar desde un estudio con seguridad privada es fácil”, criticó un usuario, mientras que otro defendió la postura de Rial, argumentando que la corrupción policial es un tema latente.
A pesar del tumulto, Rial optó por el silencio tras el programa, lo que solo avivó más las llamas de la controversia. Muchos exigen una retractación pública, mientras otros lo acusan de buscar protagonismo a costa de la seguridad pública.
Este episodio pone de manifiesto el poder de la palabra en los medios de comunicación y la responsabilidad que conlleva. La pregunta que queda en el aire es: ¿hasta dónde llega la libertad de expresión y cuándo se convierte en un llamado peligroso a la violencia? En un país dividido, el debate está servido y las opiniones, al rojo vivo.