El Terminador es una película estadounidense de ciencia ficción y acción de 1984 dirigida por James Cameron. Protagonizada por Arnold Schwarzenegger como el Terminador, un asesino cyborg enviado al pasado desde 2029 a 1984 para matar a Sarah Connor (Linda Hamilton), cuya hijo no nacido salvará a la humanidad de la extinción por una inteligencia artificial hostil en un futuro post-apocalíptico. Michael Biehn interpreta a Kyle Reese, un soldado enviado al pasado para proteger a Sarah. El guion es acreditado a Cameron y a la productora Gale Anne Hurd, mientras que el co-guionista William Wisher Jr. recibió un crédito por diálogo adicional.
Cameron ideó la premisa de la película a partir de un sueño febril que experimentó durante el estreno de su primera película, Piraña II: La Reproducción (1982), en Roma, y desarrolló el concepto en colaboración con Wisher. Vendió los derechos del proyecto a la exalumna de New World Pictures, Hurd, con la condición de que ella produjera la película solo si él la dirigía; Hurd finalmente aseguró un acuerdo de distribución con Orion Pictures, mientras que los productores ejecutivos John Daly y Derek Gibson de Hemdale Film Corporation fueron fundamentales en la financiación y producción de la película. Originalmente, Schwarzenegger fue contactado por Orion para el papel de Reese, pero aceptó interpretar al personaje principal tras hacerse amigo de Cameron. El rodaje, que tuvo lugar principalmente de noche en locaciones de Los Ángeles, se retrasó debido a los compromisos de Schwarzenegger con Conan el Destructor (1984), durante el cual Cameron encontró tiempo para trabajar en los guiones de Rambo: Primera Sangre Parte II (1985) y Aliens (1986). Los efectos especiales de la película, que incluían maquetas y animación en stop-motion, fueron creados por un equipo de artistas liderado por Stan Winston y Gene Warren Jr.
Desafiando las bajas expectativas previas a su estreno, El Terminador encabezó la taquilla de Estados Unidos durante dos semanas, recaudando finalmente $78.3 millones contra un presupuesto modesto de $6.4 millones. Se le atribuye el lanzamiento de la carrera cinematográfica de Cameron y la consolidación de Schwarzenegger como un actor principal. El éxito de la película dio lugar a una franquicia que incluye varias secuelas, una serie de televisión, cómics, novelas y videojuegos. En 2008, El Terminador fue seleccionado por la Biblioteca del Congreso para su preservación en el Registro Nacional de Películas como “cultural, histórica o estéticamente significativa”.