Rubby Pérez, el icónico cantante dominicano, falleció hace una semana en un trágico colapso durante un concierto en el club Jetset de Santo Domingo. Su manager, Fernando Soto, rompió el silencio y reveló detalles desgarradores sobre la noche fatídica y la salud del artista. Según Soto, Rubby había sufrido una caída en el baño tres días antes del evento, y a pesar de las recomendaciones médicas de no actuar, decidió subir al escenario para no decepcionar a sus fans.
La noche del 8 de abril de 2025, el ambiente en el Jetset era electrizante, con una multitud de aproximadamente 1,000 personas ansiosas por disfrutar de la música de Rubby. Sin embargo, la celebración se tornó en caos cuando el techo colapsó repentinamente durante una emotiva interpretación de “Volveré”. Testigos describieron momentos de pánico absoluto, con gritos y desesperación mientras las vigas y bloques de concreto caían sobre el público.
Las horas posteriores al colapso fueron marcadas por confusión y rumores sobre el paradero de Rubby. Fernando Soto, quien había estado a su lado durante años, reveló que la pérdida fue devastadora. En una emotiva entrevista, Soto compartió que tuvo que identificar el cuerpo de su amigo y colega, describiendo la experiencia como insoportable.
La tragedia no solo afectó a Rubby y su familia; también dejó un impacto profundo en la comunidad artística dominicana. La hija de Rubby, Sulinka Pérez, sobrevivió al colapso, pero su esposo, Rafael Mendoza, se encuentra hospitalizado con múltiples fracturas tras intentar protegerla. Varios miembros de la banda también resultaron heridos, y la pérdida de Luis Emilio Solís, saxofonista y amigo cercano, dejó a todos devastados.
Las investigaciones posteriores revelaron que el club Jetset había ignorado advertencias sobre problemas estructurales. Ante esta situación, el presidente Luis Abinader declaró tres días de duelo nacional y anunció medidas para reformar las normativas de seguridad en lugares de entretenimiento, buscando evitar que tragedias como esta se repitan.
La pérdida de Rubby Pérez ha dejado un vacío irreparable en el corazón de la República Dominicana, y su legado musical perdurará en la memoria de todos aquellos que lo admiraron.