**SHOCK EN REPÚBLICA DOMINICANA: MÁS DE 180 MUERTOS EN EL COLAPSO DE LA DISCOTECA JETSET**

Una tragedia sin precedentes ha sacudido a República Dominicana, donde el colapso de la discoteca Jetset en Santo Domingo ha dejado a más de 184 personas muertas y cientos de heridos. La noche del 8 de abril, durante un concierto del icónico merenguero Ruby Pérez, el techo del local se desplomó, convirtiendo una celebración en un caos devastador. Entre las víctimas se encuentran la gobernadora de Montecristi y expeloteros de las Grandes Ligas, un golpe duro para el país que ahora se encuentra en duelo.

Las labores de rescate han sido suspendidas, y solo quedan esperanzas entre los familiares que aún buscan a sus seres queridos entre los escombros. El jefe del operativo de emergencia, Juan Manuel Méndez, ha declarado que no se han encontrado más signos de vida, pero más de 300 rescatistas permanecen en el lugar, removiendo escombros y brindando apoyo emocional a quienes aún esperan noticias. La angustia se siente en cada rincón, cada nombre en la lista de víctimas genera lágrimas y desesperación.

Desde el exterior, figuras como Marc Anthony y Shakira han expresado su dolor y solidaridad. Mark Anthony, visiblemente afectado, envió un mensaje conmovedor a través de redes sociales, dejando claro que su corazón está con el pueblo dominicano. Se ha informado que Shakira contactó a Anthony para ofrecer su apoyo en este momento crítico, recordando que la amistad se fortalece en las adversidades.

La tragedia ha llevado al país a declarar un luto de 72 horas, mientras la comunidad internacional se une en un clamor por justicia y respuestas. Las autoridades han prometido una investigación exhaustiva, y la pregunta que permanece en el aire es: ¿hubo negligencia que pudo evitar esta catástrofe?

La música que resonaba en Jetset se ha apagado, pero el eco del dolor y la lucha por justicia resuena más fuerte que nunca. La nación entera lamenta no solo por las vidas perdidas, sino también por las lecciones que deben aprenderse para que una tragedia así no vuelva a repetirse. La herida es profunda, y la solidaridad crece en medio de la desesperanza.